La gente está loca, no toda pero si hay casos extremos a nivel mundial, sobre todo ahora por este tema tan sonado por el fin del mundo.
He leído que en diferentes lugares del mundo hay gente que está vendiendo sus propiedades para tener efectivo antes de morir, hay un pueblo completo en Francia donde dicen que van a venir a rescatarlos los extraterrestres y por esa razón los terrenos aledaños a ese pueblo de 118 personas están vendiéndose como pan caliente, es tanta la euforia que los medios de prensa están movilizándose hacia este lugar para ver el aterrizaje de la nave nodriza que va a rescatarlos a todos de este cataclismo.

Pero regresando un poco más a la realidad, aunque ni tanto, hoy hay fiestas del fin del mundo por todos lados, incontables celebraciones, a mí me pasaron la voz para ir a una por las Brujas de Cachiche, para recibir las doce y en la propaganda están los nombres de los tragos, obviamente alusivos al tema.

Si el mundo se acaba mañana o pasado mañana o en 100 años, pasara cuando tenga que pasar, no creo que la profecía de Nostradamus y el Baile del Caballo estén asociadas, si todo eso fuera eso cierto, ya hubiéramos tenido el tan sonado terremoto hace un par de meses cuando esas científicas rusas declararon que iba a suceder ese cataclismo y que nos íbamos todos a la mismísima, al final no pasó nada y ellas quedaron como una zapatilla para todo el mundo.
Solo queda esperar a ver que pasa y si no pasa nada, mañana habrá que ir otra vez a la oficina y por la noche seguir envolviendo regalos para la noche buena. Moraleja, no hay que creer todo lo que te dicen.
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