Día 1
Empecé el día con la incertidumbre de no saber si voy a lograr conseguir un nuevo asistente, con la misma rapidez con la que se me esta yendo el actual. Difícil situación.
Además de tener los problemas clásicos en la oficina, que incluyen cambios en el sistema que se utiliza, soporte a usuarios finales y correcciones a metidas de pata – y de esas hay muchas – se incluyeron las entrevistas a los postulantes.
Recibí 5 personas: 3 por la mañana y 2 por la tarde. Luego, vino la clásica revisión de los curriculums, las preguntas de rigor sobre la experiencia laboral, cuánto tiempo estuvieron en cada trabajo, qué labor realizaron, su nivel de conocimientos en programación y de manejo de base de datos, soporte técnico y cuál es su proyección actual, es decir, hacia dónde esta apuntando. No estamos buscando los súper programadores con todas las certificaciones y maestrías habidas en el mercado, pero, al menos, con un poco de conocimiento práctico y experiencia laboral en proyectos de mediana envergadura.
De esta primera tanda de entrevistas logré conseguir 2 buenos candidatos y un tercero que podría ser, las otras dos personas estaban mas allá que acá.
Día 2
Este empezó con un poco más de seguridad, ya que tenía 2 candidatos que podrían cubrir la plaza, al menos por la parte técnica, aún faltaba una segunda entrevista, ya con el área de recursos humanos.
En este día eran 4 entrevistas las que se tenía que realizar, 2 por la mañana y 2 por la tarde.
Las que fueron por la mañana no estuvieron tan bien, no por parte del conocimiento sino más por un tema de actitud y de presencia, como que no me inspiraban mucha confianza, además los colores no combinaban. Hay que tener en cuenta que no todo es siempre conocimientos, si uno se da cuenta de algo, también debe considerarse.
La tercera entrevista estuvo peor, pero aquí la cosa fue más por una confusión, la persona que vino tenía una idea y nosotros teníamos otra, es decir, esa persona estaba orientada a la administración y soporte de servidores y nosotros a la programación, por ende, esta persona tenía casi nada de conocimientos de desarrollo de software, obviamente porque no era su línea de trabajo. Me sentí mal porque la citaron sin confirmar su perfil y tuve que disculparme.
Pero eso no es todo, antes de empezar la entrevista nos quedamos sin luz por un problema en la subestación de Miraflores y un cable suelto en la avenida Petit Thouars frente a Hiraoka, el pobre postulante tuvo que bajar por las escaleras, y a mi no me quedo mas que esperar, la luz volvió a las 6pm, justo cuando ya estábamos de salida.
Está demás decir que la cuarta entrevista no se realizó, porque sin luz la persona no iba a subir 9 pisos y ahí si estoy más que seguro.
Ahora falta ver si hay más postulantes, aún tendríamos que ver por lo menos a unas 4 personas más. No hay mas que esperar.